Posted On 06/06/2014 By In Opinión With 9552 Views

Juan Stam y su Mirada Sobre la Homosexualidad

Quienes suscribimos este breve documento lo hacemos con la intención de reflexionar sobre la posición del biblista latinoamericano Dr. Juan Stam[1] respecto de la homosexualidad, según se refleja a través de algunos de sus escritos. Tenemos especialmente en cuenta su calidad de referente dentro de algunos sectores cristianos evangélicos de habla hispana, que sustentan una actitud mesurada y reflexiva respecto de ciertos temas controversiales de nuestro tiempo, sobre los cuales las iglesias cristianas no se deberían desentender.

Nos referimos particularmente a dos artículos[2] donde el Dr. Stam realiza una pormenorizada crítica a trabajos de estudiosos reconocidos como son Irene Foulkes y Renato Lings (ambos publicando en español y para Latinoamérica), y especialmente Dale B. Martin, profesor de estudios religiosos de la prestigiosa Universidad  de Yale[3]. Concentramos nuestro énfasis en la ideología y los presupuestos subyacentes en esos artículos de Stam, particularmente en la introducción de uno de ellos, donde el pensamiento del autor se hace bastante evidente. Allí da a entender que la Biblia desaprueba toda clase de relaciones entre personas del mismo sexo, un asunto éste que viene siendo re-examinado desde hace bastante tiempo, y sobre el cual muchos cristianos e incluso denominaciones enteras que utilizan otros recursos de análisis bíblico ya no adhieren

Llama mucho la atención, porque el Dr. Stam procura adoptar una actitud mesurada, intentando indagar   -según sus propias palabras- en una “relectura fiel -del mensaje bíblico- para nuestro contexto actual”, enfatizando la necesidad de “un diálogo entre la Biblia y la cultura, el pasado y el presente, el texto y el contexto”. Sin embargo, a lo largo de sus artículos parece mostrar un tanto lo contrario, aferrándose a algunos prejuicios, por ejemplo cuando -respecto del trabajo de Dale Martin- sostiene taxativamente que “queda bien claro que el adjetivo arsenokoitês presente en 1 Corintios 6:9 (uno de los textos tradicionalmente más utilizados para condenar todas las relaciones homosexuales) significa literalmente <varón que se acuesta con otro varón>”. Según su opinión, este sería “su sentido obvio, aparentemente natural”. Los términos malakós y arsenokoitês señalarian “claramente” -según sus palabras- a los participantes del rol pasivo y activo dentro de una relación homosexual. Así acusa a Dale Martin de sostener un argumento que no resulta convincente, tratándolo en un tono despectivo, cuando sabemos que el profesor de Yale cuenta con el reconocimiento de los círculos académicos más prestigiosos en la materia. Con esto, el Dr. Stam que con frecuencia utiliza los mejores recursos de la crítica bíblica contemporánea, simplemente llega a las mismas conclusiones de los estudiosos más conservadores cuando se esperaría un aporte diferente o novedoso de su parte.

¿Será que Stam -como tan frecuentemente ocurre con otros  autores conservadores- no hace más que acercarse al texto bíblico dando por sentado de antemano que éste condena toda clase de relaciones entre personas del mismo sexo, incluso aquellas duraderas, comprometidas y amorosas?  Por cierto, algunas de sus expresiones denotan ciertos prejuicios, como cuando se refiere a la “situación difícil de las personas homosexuales”, o cuando afirma que los “no muy numerosos textos bíblicos que pueden relacionarse con la homosexualidad [en realidad tan solo cinco o seis en toda la Biblia] parecen ser bastante explícitos”. También es objetable su utilización del término homosexualidad, refiriéndose a los actos homosexuales y no a la orientación sexual, dos conceptos muy diferentes que suelen prestarse a confusión. Además, habla repetidas veces de los “defensores de los derechos homosexuales” en un tono que tampoco deja de ser peyorativo, sin reconocer siquiera en algún momento la legitimidad de muchos de esos derechos.

Justamente la investigación de Martin sobre la aparición en la literatura griega extrabíblica de los términos malakós y arsenokoitês, presentes en el texto de 1 Corintios, introduce elementos muy  importantes para la comprensión del significado de estas dos palabras clave, que tienen la dificultad de ser, la primera muy ambigua y la segunda muy rara (ya que sólo aparece dos veces en toda la Biblia). A este trabajo de Martin se suman unos cuantos otros que se han venido produciendo en las últimas décadas. La conclusión de todos ellos es que dicho pasaje hace referencia a conductas sexuales exclusivamente entre varones y que tienen como denominador común el abuso, la violencia y la explotación sexual, por lo tanto, jamás se deberían usar para referirse a aquellas relaciones basadas en el amor, el compromiso y la mutualidad. Esto es algo que Juan Stam no reconoce, quizá porque se resiste a admitir una interpretación diferente a la tradicional, sin darse cuenta de que con ello contribuye a fomentar una lectura negativa sobre la homosexualidad. En la actualidad, dicha lectura no resiste las exégesis más serias y bien fundamentadas producidas por  estudiosos y académicos de gran prestigio.

Para concluir, repasamos algunos elementos de reflexión, que Stam parece no haber tenido en cuenta:

1)       Que los textos bíblicos desconocen el concepto moderno de orientación sexual suponiendo equivocadamente que todas las personas son por naturaleza heterosexuales.

2)      Que 1Co 6:9 lo mismo que 1Ti 1:10 hacen referencia a conductas sexuales exclusivamente entre varones -lo mismo que el resto de los otros cinco o seis textos bíblicos- cuando sabemos que el concepto de homosexualidad es más amplio, incluyendo al lesbianismo y  la bisexualidad.

3)      Que todos esos textos bíblicos responden a fuertes presuposiciones socio-culturales, algunas relacionadas con el género, como lo son la superioridad del varón sobre la mujer y del que penetra en una relación sexual sobre la persona penetrada. En tal sentido, sabemos que la  homofobia -muy común en muchas de las culturas antiguas- se basaba en el afeminamiento del varón que se degradaba al ser penetrado en una relación homosexual equiparándose a  la mujer.

4)      Que la lista de 1Co 6:9-10 engloba un conjunto de  actos  bajo el común denominador de injusticia (adikia, 6:9a). En tal sentido cuesta mucho entender que allí se incluya a personas del mismo sexo que, respondiendo a su orientación homosexual que es fija e inmutable, establecen relaciones responsables basadas en el amor y el compromiso, respondiendo a una necesidad de compañerismo e intimidad que forma parte de la naturaleza humana puesta por el Creador.

5)      Que  otro texto muy conocido como es 1Ti 1:10 nos proporciona importante información al agrupar arsenokoitai con pornos (prostitutos varones) y andropostai (traficantes de esclavos) en lo que se comprendería como una cadena de explotación económica sexual que puede abarcar la prostitución, la pederastia y el abuso de esclavos, conductas sexuales comunes en el mundo mediterráneo que conoció el Apóstol Pablo.

6)      Que las exégesis prejuiciosas y superficiales han provocado y siguen provocando un inmenso daño y un sufrimiento absurdo a muchísimos creyentes con orientación homosexual, que han caído presos de una  retórica homofóbica. Esto contradice las propias palabras del Dr. Stam en cuanto a que los cristianos deberían “expresar compasión, misericordia y sed de justicia hacia los homosexuales y lesbianas”.

RELACH (Red Latinoamericana Contra la Homofobia)

  • Firman este documento:

Pastor Lisandro Orlov. Iglesia Evangélica Luterana Unida en Argentina y Uruguay. Coordinador de la Pastoral Ecuménica VIH-SIDA. Profesor de Historia egresado de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Buenos Aires

Andrés Albertsen, pastor de la Iglesia Luterana Danesa Argentina, actualmente doctorando en Luther Seminary, Minnesota.

Gregorio Tobar Guzmán, clérigo ordenado en la Iglesia Católica Romana, actualmente ministrando en Iglesia de la Comunidad Metropolitana, casado, Prof. Superior en Filosofía y Ciencias Sagradas.

Natanael Disla, miembro de las Iglesias Bautistas de República Dominicana, Tesista de Maestría en Género y Desarrollo en el Instituto Tecnológico de Santo Domingo.

Luis N. Rivera Pagán. Bautista de Puerto Rico Phd.D. Yale University, 1970 Profesor emérito de Princeton Theological Seminary.

César Sequera Nuñez. Activista DD.HH LGBTI y Ministro Ordenado en la Comunidad Anglicana M. de Jesucristo. Caracas Venezuela.

Doris Olivera, evangélica bautista, estudiante de Psicología.

José Silvera, evangélico, Abogado, de Paraguay.

José Francisco Ibarra, Maestro, Profesor y Licenciado en Música. Miembro de la Iglesia Discípulos de Cristo Argentina y de la Pastoral de Jóvenes del Consejo Latinoamericano de Iglesias CLAI Argentina.

Pablo Bordenave.

María Teresa Martorell; Católica Apostólica Romana; Administradora de Casa de Encuentros Villa Asis. Argentina

Joel Zeferino, Pastor na Igreja Batista Nazareth, em Salvador – Bahia, Brasil, e músico

Gerardo Oberman Pastor de las Iglesias Reformadas en Argentina

Rafael Sánchez. Miembro de la Iglesia Menonita de Paraguay.  Máster en Educación y en Administración de Negocios

Carolina Noemi Ferrari, Metodista y miembro de ICM. Psicopedagoga y docente.

Paulina Cabrera Casanova, miembro de Iglesia Evangélica Luterana en Chile, Licenciada en Medicina.

Rev. Dan González Ortega.

Oscar Amat y Leon. Evangélico. Sociólogo y Teólogo. Profesor de Seminarios. Estudios de Maestría en Derechos Humanos.

Carlos Hermida Suárez, 44, Periodista , Prof. en Filosofía y Ciencias. de la Educación. De la Iglesia Evangélica Luterana Unida (WLF) y la Secretaría de Diversidad Religiosa de la Federación Argentina LGBT

Ricardo Porras Solis, tengo 3 años de no asistir a ninguna iglesia, comerciante, casado, una hija, soy de Costa Rica, pero resido en Bs As Argentina

Esther Baruja, Psicóloga, miembro de la Iglesia United Church of Christ de EEUU. Máster en Divinidad del Chicago Theological Seminary

Cristina Conti, Licenciada en Teología, Iglesia Discípulos de Cristo.

Marcelo Sáenz, ingeniero, miembro de la Iglesia Evangélica del Rio de la Plata, fundador de CEGLA (cristianos GLTB de Argentina)

[1] Juan Stam, nacido en Paterson (Nueva Jersey, 1928), en una familia de origen holandesa. Stam cursó sus estudios universitarios en la Universidad de Wheaton, Illinois (Bachillerato en historia 1950; Maestría en Nuevo Testamento 1955) y en el Seminario Fuller (Bachillerato en teología 1954). Después de estudios de literatura y filosofía en la Universidad de Costa Rica (1957-1961), hizo los estudios doctorales con Oscar Cullmann, Bo Reike y Karl Barth en la Universidad de Basilea, Suiza, obteniendo su doctorado en teología en 1964. También realizó estudios post-doctorales en la Universidad de Tubinga, Alemania, con Hans Küng, Walter Kasper, Jürgen Moltmann, Ernst Kaesemann y Otto Michel. Se casó con Doris Emanuelson en 1954, y a fines del mismo año emigraron a Costa Rica, donde comenzaron su ministerio con un pastorado rural en el norte del país. Son costarricenses naturalizados desde hace muchos años. También ha enseñado en universidades y seminarios en casi todos los países de América Latina y en la India, Holanda, Estados Unidos y Canadá.

[2] Dichos artículos pueden leerse en los siguientes sitios pertenecientes al blog personal de Stam:

http://juanstam.com/dnn/Blogs/tabid/110/EntryID/378/Default.aspx

http://juanstam.com/dnn/Blogs/tabid/110/EntryID/412/Default.aspx

http://www.juanstam.com/dnn/Blogs/tabid/110/EntryId/407/Default.aspx

[3] Renato Lings, ¿Se equivocaron los traductores? (UBL 2011)
Irene Foulkes, Problemas pastorales en Corinto (UBL/DEI 1996)

Dale B. Martin, Gender and Sexuality in Biblical Interpretation, cap. 3 , (Westminster John Knox Press, 2006)

VV.AA.
Últimas entradas de VV.AA. (ver todo)

Tags : , , , , , , , ,

Bad Behavior has blocked 1985 access attempts in the last 7 days.